Muchos de los problemas asociados a la elección incorrecta de lubricante o la elección de uno de baja calidad, afortunadamente, no producen fallos catastróficos en el motor. Con el paso del tiempo, los lubricantes de baja calidad pueden provocar a una menor eficiencia, una baja economía del combustible o fallos de los componentes. Pero existe un fenómeno bastante reciente que podría estar produciéndose en su motor y que podría causar un fallo catastrófico en el motor cuando menos lo espere. El fenómeno está asociado a los motores modernos turboalimentados de inyección directa de gasolina y se denomina preignición de baja velocidad o LSPI.

Para entender el LSPI, debemos tener en cuenta que, en condiciones normales, la combustión en la cámara del motor se controla muy cuidadosamente a través del tren de válvulas, la cadena de distribución y los mecanismos de levas. La preignición de baja velocidad es esencialmente una combustión incontrolada que puede producirse completamente fuera de la secuencia normal de los eventos: puede ir acompañada de altas tasas de aumento de la presión y de inversiones de las ondas de presión que pueden ser lo suficientemente violentas como para causar daños graves en el motor. Los daños generalmente se producen en los pistones y anillos en el interior del cilindro.

Si bien hay diferentes soluciones de ingeniería para ayudar a mitigar este problema, incluyendo mayores tensiones en los anillos de los pistones y varios cambios en el sistema de gestión del motor, generalmente reducen la eficiencia.

Una solución para el LSPI que no reduce la economía del combustible es el uso de un aceite de motor formulado específicamente para utilizarse en motores turboalimentados de inyección directa de gasolina. Es sumamente importante que estos nuevos aceites sean probados de manera exhaustiva y formulados adecuadamente para proporcionar una protección total al motor. Se han desarrollado nuevas especificaciones para la industria y los fabricantes de equipos originales para incluir la protección contra LSPI, incluyendo API SP y Daimlers MB229.52.

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• Totalmente compatible con dispositivos de postratamiento, como los filtros de partículas de gasolina (GPF)
• Protección superior contra LSPI
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